Arzobispo de Piura celebra Misa de Año Nuevo con fieles

31 de diciembre de 2016 (Oficina de Prensa).- Cientos de fieles se congregaron la noche de hoy en la Basílica Catedral de Piura para participar de la Santa Misa y Te Deum de fin de año, en el marco de la celebración de la Solemnidad de Santa María Madre de Dios. La Eucaristía fue presidida por Monseñor José Antonio Eguren Anselmi, S.C.V., Arzobispo Metropolitano de Piura y concelebrada por varios sacerdotes de la Arquidiócesis, fue especialmente ofrecida en acción de gracias a Dios por todos los dones recibidos, para pedir perdón por los errores cometidos durante el año que termina e implorar su bendición durante el nuevo año que comienza. Antes de finalizar la celebración eucarística se cantó el tradicional himno del “Te Deum” como agradecimiento al año que finaliza.

misa-ano-nuevo-2016-18Al iniciar su homilía, nuestro Pastor reflexionó sobre la necesidad de que todos los católicos iniciemos el nuevo año alabando y glorificando a Dios por todo su amor y misericordia, evidenciados en el haberse hecho hombre y nacer entre nosotros para salvarnos: “En esta Santa Misa queremos dar gracias a Dios por todos los beneficios recibidos a lo largo del año que terminamos y pedir su bendición para que su gracia y amor nos acompañen a lo largo del Nuevo Año que estamos por comenzar. Son cuatro las ideas que esta noche quiero compartir con ustedes. En primer lugar decirles que con la solemnidad de Santa María, Madre de Dios, concluimos la Octava de Navidad; estos ocho días en que hemos profundizado en el gran misterio de la Encarnación. Por ello la gran pregunta que tenemos que hacernos al finalizar la Octava Navideña es si la fiesta de la Navidad ha dejado o no una huella profunda en nuestras vidas. ¿La Navidad significó algo para mí más allá del bullicio, los buenos deseos, los regalos y las compras y ventas de estos días? Todavía estamos a tiempo de rescatar el sentido auténtico de la Navidad y tener la actitud de los pastores y de los ángeles de alabar y glorificar a Dios por todo lo visto y oído, es decir comprender que Navidad es Jesús, es la buena noticia del nacimiento de Dios de María Virgen para ser nuestro Salvador, el Dios-con-nosotros”.

misa-ano-nuevo-2016-6Monseñor Eguren, resaltó también que al comenzar este nuevo año se abre la oportunidad perfecta para renovar nuestra fe y amor a Cristo: “En segundo lugar nos aprestamos a celebrar un nuevo año, el 2017. La pregunta que surge espontánea en nosotros es: ¿2017 años de qué? La respuesta es del nacimiento de Cristo. Por eso San Pablo nos ha dicho en la segunda lectura: «cuando llegó la plenitud de los tiempos envió Dios a su Hijo nacido de mujer» (Gal 4, 4). El Señor Jesús, el Hijo de Dios ha entrado en nuestra historia hace 2017 años para transformarla en historia de salvación. Para ser el único Camino a recorrer, la única Verdad a ensayar, la única fuente de Vida de la cual beber. Fuera del Señor Jesús no hay felicidad, sentido, libertad, alegría, y reconciliación. Por eso al comienzo del año hay que renovarle nuestra fe y adhesión, poner en Él toda nuestra confianza, y no en los amuletos, las cábalas, la hechicería, las cartas, los horóscopos, etc”.

misa-ano-nuevo-2016-1“En tercer lugar San Pablo nos ha dicho algo muy interesante: «Envió Dios a su Hijo nacido de mujer». Lo normal entre los judíos era identificar a alguien por su padre, pero Jesús es identificado por su Madre María, porque Jesús es Hijo de Dios y de María Santísima. Por eso al comienzo del nuevo año celebramos la Maternidad Divina de la Virgen María. Pero como nosotros somos también hijos de su gran fe, nos ponemos bajo su cuidado y guía maternales para implorarle que a lo largo de todo el 2017 nos cuide y guarde de todo mal y nos conduzca siempre al encuentro de vida con su Hijo Jesús. Por eso todos los días del año debemos rezarle: «Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies las oraciones que te dirigimos en nuestras necesidades, antes bien líbranos siempre de todo peligro, ¡oh Virgen gloriosa y bendita! Amén»”.
Al concluir su homilía nuestro Arzobispo, exhortó a los presentes a unirse en oración con el Santo Padre para que este nuevo año reine especialmente la Paz en el mundo: “Finalmente al comienzo del Nuevo Año celebramos la Jornada Mundial de la Paz la cual cumple cincuenta años de creación. La jornada de este año tiene por título: “La no violencia: un estilo de política para la paz”. En su mensaje el Papa Francisco lanza un especial desafío a los católicos y a los líderes políticos para que la paz reine en todo el mundo en el año 2017, que la violencia sea desterrada de la vida de cada uno y que ello se haga realidad a través de nuestra oración y acción. Para poder hacer realidad la paz, el Papa Francisco explica que es necesario abrirse al Señor, porque quien acoge la Buena Noticia de Jesús reconoce su propia violencia y se deja curar por la misericordia de Dios, convirtiéndose a su vez en instrumento de reconciliación, según la exhortación de San Francisco de Asís: «Que la paz que anunciáis de palabra la tengáis, y en mayor medida, en vuestros corazones». ¡Un Feliz Año Nuevo con Jesús y con María!”.

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