Hombre aparece vestido con túnica blanca y asegura ser ‘Jesús’

Perú Católico, líder en noticias.– Sergey Anatolyevitch Trop, Nacido el 14 de 1961a ledna Sus seguidores lo conocen como Vissarion. Fundó y lideró un movimiento religioso, que es conocido como la Iglesia de la Última ley.

Hace 5 años contaba con más de 10 mil seguidores en el mundo, actualmente suman 60 mil. Dice que vino a restaurar la tierra de pecado el objetivo de este hombre es unir a todas las religiones de la tierra. Es conocido por su movimiento La Iglesia del Último Testamento. Dice tener poderes sobrenaturales para juzgar y golpear la tierra con toda clase de plagas.

Vissarion nació en Krasnodar y el servicio en el Ejército Rojo, se estableció en Minusinsk. Trabajó como agente de tránsito, antes de que él perdió su trabajo en 1989. En 1991, fue “renacer” como Vissarion, volvió a decir, como Jesucristo. Vissarion se dice que es la reencarnación de Jesús.
Enseña la reencarnación, el veganismo y el fin próximo del mundo, la desaparición de la civilización como la conocemos.

Su religión combina elementos de la Iglesia Ortodoxa Rusa con el budismo. Sus seguidores observan normas estrictas, son vegetarianos estrictos y no se permiten los malos hábitos como fumar o beber alcohol. El dinero está prohibido en esta comunidad. El Grupo pretende unificar todas las religiones en la Tierra.

El “Mesías” ahora imparte enseñanzas en 30 templos que albergan a unas 4 mil personas en Rusia. Su iglesia del Último Testamento, que dice ser una síntesis de las religiones monoteístas y del budismo, se expande en armonía con la naturaleza.

“Visarion el Profesor”, un ex agente de tránsito, que luce barba oscura y cabello largo, se autoproclamó reencarnación de Jesús y se instaló en una nueva Tierra Santa, en un lugar aislado de Siberia, junto a sus fieles.
Este hombre, que según él se supo hijo de Dios hace 20 años, atraviesa la masa de fieles que se congregaron en Petropavlovka, un pueblo de la región de Krasnoiarsk, para ver a su salvador, que se dirige a ellos.
“¡Es el amor en la Tierra! ¡Lo sentís?, grita un hombre ante la masa de miles de peregrinos venidos este 18 de agosto, una fecha célebre cada año en recuerdo del primer sermón de Visarion, que en realidad se llama Serguei Torop.

Los miles de fieles, que según ellos viven en comunión con la naturaleza, rechazando sobre todo la carne, el alcohol y el tabaco, se ven como una nueva arca de Noé, ya que están convencidos que el hombre está destruyendo el planeta y que Petropavlovka, el centro de la Tierra, se salvará del desastre.

“Siento que la energía aquí será suficiente para salvar al planeta del cataclismo”, explica Irina Besseda, de 38 años.
Visarion, quien afirma que se dio cuenta de que era Jesús al sentir que “algo violento surgía” en su interior en 1989, es menos optimista: seguro de que la catástrofe es inevitable, su modesto objetivo es evitar la extinción de la especie humana.

“El hombre se acerca cada vez más a su destrucción. Será muy desagradable y trágico, habrá mucho dolor, pero es ineluctable”, dice Visarion.

Visarion cambió el calendario para hacerlo empezar en el día de su nacimiento, el 14 de enero de 1961, y sus fieles viven en 1955.
“Tenemos que creer en algo que ayudará a salvar a la Humanidad (…) un arca de Noé”, añade el gurú, que cree que la cara del mundo cambiará, pero que Petropavlovka sobrevivirá sin grandes cambios, más allá del clima, que será más suave.

Su iglesia del Último Testamento, que dice ser una síntesis de las religiones monoteístas y del budismo, no recluta fieles sólo en Rusia, sino también en Bielorrusia, Cuba, Italia, Alemania y Bulgaria.

En Europa “hay de todo, cocktails, conciertos, gente interesante (…) es simpático, pero eso no es lo que buscaba mi alma”, explica Lineta Maskalinaite, una lituana de 43 años, que hace dos dejó su trabajo en Bruselas.

Los creyentes parecen estar bien instalados, las casas de madera son nuevas y los paneles solares suministran electricidad a los hogares. Pero esta presentación idílica deja dubitativo al experto ruso en cultos Alexandre Dvorkin.

“Parecen felices y alegres, como la gente filmada en 1937″ durante las purgas estalinistas, ironiza al denunciar la influencia total de Visarion sobre sus fieles.

Aunque ningún problema grave fue detectado últimamente, en los años 90, cuando el culto prohibía la medicina moderna a pesar del clima extremo de Siberia, hubo muchas muertes y suicidios.

“Yo era una romántica (…) pero al inicio había muchas muertes, muchos de mis amigos”, recuerda Maria Kaprinskaia, una ex adepta reconvertida en periodista en Moscú.

“Su intento de convertirse en Dios fracasó. No es más que un señor feudal con siervos”, dice.

Más tarde, Visarion levantó algunas restricciones, sobre todo en relación a la medicina, explica Rachid Rafikov, un responsable gubernamental de Krasnoiarsk.

“Vivir de nueces, bayas y champiñones no es posible”, explica, “el culto tiene un verdadero problema para alimentarse sólo con sus huertos”.
Lo que la Biblia nos habla de estos movimientos, el Mesías?