PAPA en Perú: 36 comunidades nativas que esperan al Papa Francisco
Perú Católico, líder en noticias.– En Madre de Dios. Es una de las primeras que recogió a las etnias que huían de la fiebre del caucho. Viven 200 descendientes de shipibos, campas y machiguengas que hoy están en riesgo por la minería ilegal, la trata de personas y la contaminación. El obispo de Puerto Maldonado señala que Francisco se reunirá con 3 mil 500 nativos. Fundador de albergue de víctimas espera que su llegada haga reflexionar a mafias.
Allí están juntos, encerrados entre las paredes y el techo de madera del convento que fue fundado por los sacerdotes dominicos que salvaron a sus abuelos y padres, en plena fiebre del caucho durante la primera década del siglo XX. Ceferino Kirisina (77), Aurora Campos (86) y Manuel Kuakibehue (57) provienen de distintas etnias, pero son una sola voz.
El shipibo carga un antiguo relicario de la Virgen del Pilar, cuyo mármol pesa como los racimos de plátanos que cosechan. La campa recuerda su niñez cuando era evangelizada y el ese eja Manuel explica que sus descendientes aprendieron a vivir unidos luego de huir de los maltratos, los abusos y la explotación de los hombres blancos que estaban seducidos por la goma que convertían en llantas. Con sus diferencias en rasgos culturales y lengua, ellos y otras 200 personas integradas en 42 familias, viven hoy en la comunidad nativa de El Pilar.
La tierra de Ceferino, Aurora y Manuel es una de las primeras comunidades nativas de la región Madre de Dios, de las 36 existentes, que albergó a diversas etnias amazónicas explotadas por los ambiciosos del caucho. Tiene cerca de 100 años, es católica y sobrevive aislada a una hora en canoa de la ciudad de Puerto Maldonado, adonde, precisamente, llegará el papa Francisco el viernes 19 de enero del 2018.
“Acá los sacerdotes fundaron el convento, un internado y hasta una pista de aviones. Ayudaron a nuestros abuelos y padres de una amenaza, pero ahora nosotros vivimos otra: la indiferencia y los problemas que trae la minería ilegal“, cuenta Ceferino, quien llegó a la comunidad–al igual que Aurora– cuando era niño.
En El Pilar viven de la agricultura y la pesca. Comen lo que cosechan. “Nosotros conservamos la selva, el bosque, pero no nos toman en cuenta”, afirma Manuel, un ex líder de la comunidad nativa, cuya escuela primaria tiene una sola profesora para todos los grados. “No han llegado libros de comunicación y matemáticas hasta ahora. Tampoco hay nuevas mesas y sillas. Si no fuera por un padre que me trae en canoa, los niños no tendrían qué estudiar”, narra ella.
A una hora de la ciudad y frente a la comunidad de El Pilar, la minería ilegal muestra sus garras. Aun, durante la visita de La República, estaban las máquinas lavadoras de oro y los estragos que dejan.
Papa va a su encuentro
El Papa Francisco visitará Puerto Maldonado, capital de Madre de Dios, por ser “símbolo de los pueblos originarios y amazónicos”. También por la problemática vinculada a la minería ilegal, trata de personas y el trabajo infantil, cuyas víctimas no tienen voz.
“El Papa viene a darles un mensaje de solidaridad a las comunidades indígenas: decirles que no están solas. Que la ley de la selva, la del más fuerte, debe detenerse. Es momento de reflexionar”, señala el obispo del Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado, David Martínez de Aguirre, quien agrega que en su sector hay 30 mil nativos de 111 comunidades, en el que se incluyen a los de las provincias de La Convención (Cusco) y Purús y Atalaya (Ucayali).
El próximo 19 de enero el papa Francisco se reunirá con 3 mil 500 representantes de comunidades indígenas en el Coliseo Cerrado de Puerto Maldonado. Llegarán también desde Jaén (Cajamarca), Yurimaguas (San Martín), San José (Amazonas), Iquitos, Requena (Loreto), Pucallpa (Ucayali) y San Ramón (Junín). Además estarán los de Brasil y Bolivia.
En ese grupo también esperan estar los pobladores de El Pilar. Ellos van a rezar, algunos domingos, a la iglesia de la ciudad. Pueden perder las vestimentas y algunas costumbres ancestrales, pero no la fe: Ken weret Apagntonë Francisco bowachakne orota motodiayne. Quiere decir: “El papa Francisco es nuestro aliado”, señalan.
Después de esa reunión, el Sumo Pontífice visitará el Instituto Jorge Basadre, donde se reunirá con 120 mil fieles y el hogar El Principito, reconocido albergue para niños, niñas y adolescentes que han sido víctimas de violencia física, sexual y psicológica. Allí, cerca del río Madre de Dios, 30 niños y 10 jóvenes intentan olvidar esos episodios que nunca les debieron ocurrir.
El padre suizo Xavier Arbex de Morsier (75) es el padre Javier. Su nombre se españolizó en estos 21 años desde que fundó el albergue que, en parte, alivia el abandono y la explotación de sus inquilinos.
En lo que va del año, en Madre de Dios se han reportado 477 casos de violencia familiar. También hay 164 menores víctimas de violencia física y sexual, según el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP). Esta región es además la segunda con la más alta tasa de homicidios del país (22,8 muertes por cada 100 mil habitantes, según el INEI).
“Yo temo por mi esposa y mi hija porque los delitos de la minería ilegal (trata, robos, asesinatos) están llegando a la ciudad”, responde Valerio (38), quien, al mes de trabajar en La Pampa, huyó sin dejar rastro.
El padre Xavier dejó las tierras frías de Puno y se internó, por 8 años, en la selva de Madre de Dios, luego de que viera cómo los niños desaparecían cuando iban a esa misma zona. “Cargaban carretillas. Un día, llegó la maquinaria. Nosotros pensamos que iban a asfaltar la trocha, pero no. Desde ese momento las maquinarias pesadas reemplazaron a los niños”.
Hora de reflexionar
“El Papa no cambiará esto, pero su venida hará tomar conciencia de lo que ocurre”, dice. También servirá para reivindicar a los nativos. “En Puerto Maldonado no hay una calle que tenga un nombre oriundo. La vía Fitzcarrald, empresario del caucho, debería llamarse la Av. de los Pueblos Indígenas”, agrega. Hoy el padre Xavier no sabe qué le dirá a Francisco en esos 30 minutos que tendrán. Quizá no harán falta las palabras porque en la entrada del albergue él verá la frase: “Solo se mira bien con el corazón”.
Claves
El papa Francisco estará en Lima el jueves 18 de enero. Luego, al día siguiente, irá a Puerto Maldonado y el sábado 20 estará en Trujillo, zona afectada por el fenómeno El Niño costero.
Esta será la primera visita de un Sumo Pontífice al Perú en 30 años. En 1985, Juan Pablo II visitó Arequipa, Ayacucho, Cusco e Iquitos; además de Lima, Trujillo y Piura, ciudad fuertemente golpeada por El Niño. Tres años después visitó Lima brevemente.
En la actualidad, el 60% del territorio nacional es amazónico y acumula una de las fuentes de agua más grandes del mundo. Por eso, Francisco trata de sensibilizar sobre las amenazas que hay contra las comunidades nativas.
El Papa va a Madre de Dios también por la problemática vinculada con la minería ilegal, trata de personas y el trabajo infantil, cuyas víctimas no tienen voz. Fuente: La República.
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María
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