La Iglesia celebra a Santa María Goretti, “pequeña y dulce mártir de la pureza”

Este texto narra la historia de Santa María Goretti, una niña italiana de once años que fue asesinada por resistirse a ser violada. A pesar de sufrir catorce puñaladas, María perdonó a su agresor antes de morir, siguiendo el ejemplo de Cristo en la cruz. Su sacrificio y actitud misericordiosa conmovieron al Papa Pío XII, quien la llamó “pequeña y dulce mártir de la pureza”.

María Goretti provenía de una familia pobre pero profundamente religiosa. Un día, mientras estaba sola en casa, un joven llamado Alessandro intentó abusar de ella y, al resistirse, la apuñaló. María fue llevada al hospital, donde falleció después de recibir los sacramentos. Antes de morir, perdonó a su agresor y dejó ese perdón como un legado de misericordia para la cristiandad.

Después de cumplir su condena, Alessandro se arrepintió y buscó el perdón de la madre de María, quien también lo perdonó. La historia de María Goretti se presenta como un mensaje para la juventud actual y futura, recordando la importancia de la valentía, el sacrificio y el rechazo al mal en busca de la auténtica felicidad. El Papa San Juan Pablo II destacó la importancia de la pureza y la castidad como guardianes del verdadero amor.