¡Oremos! Benedicto XVI anuncia su muerte y encuentro con Dios

La fotografía de esta nota es la última y más reciente tomada a Benedicto XVI, en el cual se ve que ha perdido peso y masa muscular.

El Papa Emérito Benedicto XVI está con cuidados particulares más intensos y permanentes ante una salud debilitada por la propia edad.

Tanto su secretario y personal de confianza han señalado a pocas fuentes que Benedicto XVI se va apagando poco a poco de manera permanente. A ello se suma unos preparativos que estarían haciendo en caso de su deceso.

El mismo Papa Emérito Benedicto XVI ha dicho: “Muy pronto me presentaré ante el juez definitivo de mi vida. Aunque pueda tener muchos motivos de temor y miedo cuando miro hacia atrás en mi larga vida, me siento sin embargo feliz porque creo firmemente que el Señor no solo es el juez justo, sino también el amigo y el hermano que ya padeció Él mis deficiencias y por eso, como juez, es también mi abogado (Paráclito)”. 

Agrega: “En vista de la hora del juicio, la gracia de ser cristiano se hace evidente para mí. Ser cristiano me da el conocimiento y, más aún, la amistad con el juez de mi vida y me permite atravesar con confianza la oscura puerta de la muerte. A este respecto, recuerdo constantemente lo que dice Juan al principio del Apocalipsis: ve al Hijo del Hombre en toda su grandeza y cae a sus pies como muerto. Pero el Señor, poniendo su mano derecha sobre él, le dice: «No temas: Soy yo…». (cf.Ap 1,12-17).

Queridos amigos, con estos sentimientos os bendigo a todos.

Benedicto XVI

Este texto es parte de una carta que el mismo Papa Emérito redactó.