Para nosotros los católicos, el Papa es el legítimo sucesor de Pedro y por lo tanto, le profesamos obediencia. Pero, ¿en qué basamos esta afirmación?

Cristo puso a Pedro al frente de su iglesia:

Nadie puede dudar, lo que está claramente expuesto en las escrituras: Cristo, quien es cabeza invisible de la iglesia, nombró a Pedro, su sucesor, y cabeza visible de su iglesia:

“Tu eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y el poder de la muerte no prevalecerá contra ella. Yo te daré las llaves del reino de los cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo” (Mateo 16, 18-19)

Jesus nombró a Pedro, pastor de su rebaño “…Jesús dijo a Simón Pedro: «Apacienta mis ovejas.»” (Juan 21, 15-17) “Este oficio pastoral de Pedro y de los demás Apóstoles que pertenece a los cimientos de la Iglesia, se continúa por los obispos bajo el primado del Papa”. (CIC, cc. 881), 

Pedro fue el primer obispo de Roma

Según la tradición brindada por los antiguos Padres de la iglesia, después del Cenáculo de Jerusalén y de Antioquia, Pedro se estableció en Roma, donde culminó su vida con el martirio. 

La sede de Pedro fue Antioquia, en esta ciudad “evangelizada por Bernabe y Pablo… “por primera vez, los discípulos recibieron el nombre de “cristianos” (Hechos 11, 26).

Es así como Roma, recibió la tarea confiada por Cristo a Pedro de estar al servicio de todas las iglesias particulares, para la edificación y la unidad de todo el Pueblo de Dios.

“…así, por disposición divina, quien le sucede como Obispo de Roma, le sucede también en el supremo gobierno de la Iglesia”.  (CIC, cc. 882)

Así como Pedro, el Papa es el fundamento visible de la unidad de la iglesia

El Papa, Obispo de Roma y sucesor de Pedro, “es el perpetuo y visible principio y fundamento de la unidad, tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fieles”. (LG 23). Es el Vicario de Cristo, cabeza del colegio de los obispos y pastor de toda la Iglesia, sobre la que tiene, por institución divina, la potestad plena, suprema, inmediata y universal. (CIC, cc. 182)

La voluntad del Señor es que seamos un “solo rebaño con un solo pastor” (Juan 10 : 16). En ese sentido, el Papa promueve la unidad de todos los cristianos, tal como lo desea Cristo Jesús: “… para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en tí, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que me enviaste “ (Juan 17 : 21). 

La sucesión Papal, y la obediencia al Santo Padre, es una de las principales razones por la que la iglesia se ha mantenido unida por más de 2 mil años. 

Es importante recordar que un Papa válidamente elegido no recibe su misión de manos humanas, sino del Espíritu Santo. El Sucesor de Pedro no es un “representante” de los cardenales ni de los obispos ni de los fieles, sino que ha recibido una llamada especial de Dios. Pero no deja de ser un ser humano, por eso,estamos llamados a orar por él constantemente.

Recapitulando, Cristo nombró a Pedro la piedra sobre la cual edificó su iglesia, le dio el poder de las llaves y lo nombró pastor de su rebaño. Pedro fue el primer obispo de Roma y por lo tanto se mantiene la continuidad, y al mantener esta continuidad se mantiene también la unidad de la iglesia, lo que nos da la seguridad de que el Evangelio que tratamos de predicar es el mismo que nos legó nuestro Señor Jesúcristo.

No se trata de ser seguidores de hombres, sino de ser obedientes a la voluntad del Señor.

LG: Lumen Gentium – Concilio Vaticano II

CIC: Catecismo de la Iglesia Catolica

Por Lessie Malaga