Perú Católico, líder en noticias rumbo al Bicentenario de la Independencia. Este artículo es escrito por el Doctor e Historiador José Antonio Benito.

Bajo el lema: “Con el Señor de los Milagros, resucitemos como Perú ¡Ahora!”, Monseñor Carlos Castillo, arzobispo de Lima, egresado sanmarquino, en colaboración de los obispos titulares y auxiliares de la Gran Lima nos escribieron en el 2020 una documentada y cordial carta pastoral por el mes morado con motivo de los 333 años de la primera procesión.

El historiador José Antonio del Busto, al caracterizar la identidad nacional, distinguía la patria (nacida hace 15.000 años con el ingreso de los primeros cazadores nómadas a nuestro territorio), la nación (surgida en el siglo XVI con los primeros mestizos, especialmente con Garcilaso) y el estado (libre y soberano desde el 28 de julio de 1821 con la proclamación de la Independencia). Su determinación de autonomía le convierte en país “independiente, uninacional, pluricultural, multilingüe y mestizo”. Víctor Andrés Belaunde acuñó el término de “peruanidad” como proyecto y utopía de una solidaridad en marcha, y la convicción de un somos, un podemos y un debemos ser; es la “síntesis viviente”, como simbiosis de valores culturales y espirituales lejanos y cercanos, con sus mitos, tradiciones y costumbres, y que se remoza constantemente por su propio impulso vital y con un destino propio, personal.

Pocas realidades encarnan de modo tan pleno este concepto como la del Señor de los Milagros como aglutinador de los peruanos, tanto los que viven dentro como fuera del Perú. En nuestros tiempos de globalización que amenazan con una colonización cultural uniformadora, la devoción al Cristo Moreno es una garantía para afianzar la peruanidad (“hagamos grande nuestro Perú” –se canta en el himno) sin cerrarse al diálogo intercultural, tal como desea la Iglesia. De hecho, el Señor de los Milagros se está convirtiendo en auténtico embajador del Perú en el mundo.

En el marco de la conmemoración del Bicentenario patrio, valoramos las declaraciones oficiales estatales sobre el Señor de los Milagros que le confieren un valor de primer orden cultural identitario: En el 2005, la Resolución Directoral Nacional Nº 1454/INC del Instituto Nacional de Cultura, y su declaración de la “Festividad del Señor de los Milagros” como Patrimonio Cultural de la Nación. La segunda, el Proyecto de Ley Nº 4022/2009-PE, convertido en Ley Nº 29602, por la que se declara al Señor de los Milagros como Patrono del Perú, “símbolo de religiosidad y sentimiento popular” del Perú. http://jabenito.blogspot.com.es/2013/09/la-devocion-al-senor-de-los-milagros.html.

No es un milagro menor -como puede atestiguar la restauradora oficial de la imagen Liliana Canessa- el hecho de que, a pesar de los terremotos fuertes y violentos de 1655, 1687, 1746, 1970, 1974, 2007, la pintura del Señor de los Milagros no se haya perdido. El más fuerte se produjo en la madrugada del 20 de octubre de 1687, cuando un tsunami arrasó con el Callao y parte de Lima, derribando la capilla edificada en honor a la imagen de Cristo, quedando solamente erguida la pared del Cristo de Pachacamilla o de las Maravillas. Tan terrible evento originó que se confeccionara una copia al óleo de la venerada imagen que, por primera vez Desde entonces sólo dos veces ha dejado de salir salir al encuentro con el pueblo fiel: en 1882 por la infausta Guerra del Pacífico y el año pasado 2020 y 2021 por la covid-19.

Gracias al generoso compromiso de su cuarto mayordomo, el español Sebastián de Antuñano, se fueron organizando las cuadrillas y se consolidó la Hermandad; la compra del terreno de lo que será el Santuario y su solicitud para que la ecuatoriana Sor Antonia Lucía -quien trajo, además, la imagen de Nuestra Señora de la Nube- continuase acompañando al Señor originando la devota presencia de las Carmelitas Nazarenas, consolidó el multitudinario fervor por el Cristo de Pachacamilla. Iniciado por afrodescendientes en un distrito de indios trasladados desde Pachacama, acrisolado por la entrega de un español y una ecuatoriana, terminará hermanando a todos los grupos del Perú, siendo la corporación más genuina de la peruanidad en el exterior. Entre las numerosas gracias recibidas cabe señalar que, incluso en los años del terrorismo, suscitó Los Misioneros de la Reconciliación del Señor de los Milagros  en 1987 con el fin de brindar la paz y misericordia por los rincones más apartados del Perú.

No podemos por menos de agradecer esta entrañable forma de caminar juntos, “Fratelli tutti”, sinodalmente, celebrando el gozo de la fe y comprometidos con los más necesitados, como siempre nos alienta el Papa Francisco.  Sí, como refiere en su carta Mons. Miguel Cabrejos, arzobispo de Trujillo y presidente de la CEP y del CELAM: “¡Gracias, Señor de los Milagros, por unirnos, por renovar nuestra fe, por mantener viva nuestra esperanza!”, pidiéndole que “al inicio de un nuevo centenario de nuestra independencia, hagamos vida nuestro cato: Con paso firme de buen cristiano, hagamos grande nuestro Perú. Paz y bien”.

En la Misa por la Nación, Monseñor Carlos Castillo, arzobispo de Lima, en presencia de las máximas autoridades civiles del Perú, al calor del Bicentenario patrio, pidió a “nuestro Señor de los Milagros nos inspire para que la grandeza de nuestra Patria consista, sobre todo, en el don preciado de  un corazón grande para amar,..como pueblo verdaderamente libre, es decir, libre para amar y servir al bien común, en especial al bien de los mas débiles y marginados…Pidámosle nos dé aquel corazón misericordioso que Jesús, desde la cruz, aceptó la muerte, y no se quedó allí, como dijo nuestro Papa Francisco en el mensaje del año pasado, “por la fuerza de los clavos sino por su infinita misericordia”, alejando de nosotros la imagen de un Dios que amenaza, y más bien, inaugurando en la humanidad la era del Dios Padre, dador de amor gratuito, por medio de su Hijo que entregó el Espíritu, gracias al cual comenzó hace más de 20 siglos la regeneración de la humanidad, como hija y para hacerse hermana por la fuerza de la fe”.

Foto del autor de esta sección y artículo: Doctor e historiador José Antonio Benito Rodríguez.

*No olvides de ingresar a este enlace en donde encontrarás todos los personajes que forjaron nuestra independencia: https://perucatolico.com/c/la-iglesia-ante-el-bicentenario/