Hace más de dos mil años nació el Cristo, el Ungido, el que se dijo llamar el Hijo de Dios. En un pesebre humilde, en medio de la noche, una Virgen de nombre María dio a luz al Salvador de la humanidad, a quien llamó Jesús. Una gran estrella se hizo notar esa mágica noche que vio la llegada de Dios hecho hombre.

¿Cómo un hombre transformó la humanidad? Con sus obras y acciones nos dio un mensaje de paz y amor que llenó muchos corazones y salvó muchas vidas. Los cristianos creemos que Jesús es el hijo de Dios, el Mesías esperado que vino para salvar a la humanidad a lo largo del tiempo. Por ello, cada 25 de diciembre recordamos su nacimiento, es un día especial.

Dios quiso hacerse como uno de nosotros para enseñarnos el camino de salvación, se pareció en todo al hombre menos en el pecado, porque es Dios. No olvidemos que Él está presente en nuestras vidas, tocando las puertas de los corazones.

Jesús, el hombre que conquistó a la humanidad, nos siga revelando el misterio de su amor y entrega, siga perdonándonos y siga naciendo en cada pesebre de nuestros frágiles corazones.

En medio de esta noche entre familia y amigos, entre regalos y comidas, entre juegos artificiales, date un tiempo para ponerte en presencia de Dios frente a tu hermoso nacimiento que tienes en tu hogar y pregúntale qué quiere Él de ti.

Que recibas estas fiestas en familia compartiendo mucho amor. Recuerda que la Navidad es el cumpleaños de Jesucristo.

¡Feliz Navidad!

Franco Segura.